Villena se encuentra de nuevo en la antesala de vivir una bonita jornada de Romería.

Año tras año se repite, mismo recorrido, mismos actos, mismos horarios,... Pero lejos de alcanzar la rutina, siempre se muestra para los romeros y romeras como novedosa y especial. Cada año es distinto, con diversos matices, con diferentes recuerdos. Acompañar a La Morenica, sentirla cerca en sus andas, despierta siempre "algo" adormecido, sentimientos que permanecen aletargados en la memoria y se dan rienda suelta en algún instante mágico del pensamiento.

Ya estamos de Romería, puesta de largo para nuestras fiestas, para nuestros Moros y Cristianos. Junto a un festero y matutino pasacalles, que dará lugar a una tarde de convivencia y compañerismo, que despertará en cada uno de nosotros y nosotras, esa adormecida religiosidad que de alguna manera llevamos dentro.

Cada cual a su manera, con sus recuerdos y sentimientos, con sus alegrías y también con esas indispensables vivencias del pasado que, evocan a quienes no están, provocando así esas necesarias leves trazas de emoción y tristeza...

La Virgen llega a Villena y nuestros cargos la esperan impacientes.

Este año, los arcabuceros reciben a la patrona con la cartuchera cargada por la mitad, pero repleta de alegría y ganas de fiesta.

 La Virgen ya esta en su trono. Todo preparado para que empiecen las fiestas en Villena.

¡¡¡Viva la Morenica!!!